TEORÍAS Y METODOLOGÍAS DEL ESTUDIO DE LAS RELIGIONES
Material preparado por Francisco DIEZ DE VELASCO
UNIVERSIDAD DE LA LAGUNA
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La religión en el ciberespacio: internet como fuente para el estudio de las religiones

El campo disciplinar al que se dedica la disciplina de estudio de las religiones es uno de los privilegiados en este sistema mundial de intercambio de información que es internet desde sus comienzos. La religión fue uno de los primeros contenidos incluidos de modo masivo (junto a la pornografía). Un ejemplo: Heaven's Gate en 1997 y el discurso de que internet multiplicaría las sectas y su acción destructiva (https://fradive.webs.ull.es/OCW/27b/index.html).

Vías que abre internet a la hora de desarrollar un estudio sobre religiones:

1) Bibliografía. Una vía de carácter instrumental, es la posibilidad del acceso remoto a bibliografía de todo tipo. En la actualidad el desarrollo de las bases de datos bibliográficas, que permite desde cualquier lugar de trabajo conocer los fondos bibiográficos de grandes bibliotecas cuyos catálogos están informatizados, es el capítulo más notable. De este modo se puede programar de una manera mucho más eficaz el acopio bibliográfico o incluso una visita de investigación a alguno de esos centros. El interés a la hora de desarrollar una investigación (por ejemplo una tesis doctoral o un TFM) es innegable, puesto que es rara la gran biblioteca que no tiene informatizados sus fondos y ofrece los datos en internet. Hay que añadir los gestores de bibliografía (como Mendeley, EndNote, Refworks o Zotero, por ejemplo), cada vez más potentes y que simplifican la confeción de listados bibliográficos para publicar así como su estandarización siguiendo diferentes sistemas de cita al uso o que puedan exigirnos a la hora de publicar o presentar un trabajo. Pero esta posibilidad, a pesar de su indudable utilidad (por ejemplo a la hora de confeccionar listas bibliográficas en fases preliminares de trabajos de investigación) no es la que presenta mayores potencialidades. Aunque se encuentra solamente en su comienzo (paralizado por el escollo de los derechos de autor y su respeto, que es diferente en distintos países siendo Francia uno de los más estrictos que lleva a que se infracite la producción francesa reciente), internet tenderá en el futuro a convertirse en el lugar en el que se pueda acceder a la mayoría de la bibliografía necesaria para cualquier investigación obviando el desplazamiento físico a la biblioteca. Ya se está ofreciendo, digitalizado, mucho material anterior a comienzos del siglo XX (no sometido a la legislación sobre copyright), así como versiones en formatos digitales de estudios más recientes. Por ejemplo internet resulta básico para acceder a textos religiosos en traducciones y soportes fiables (o particularmente interesantes porque los producen desde el interior de las religiones que se desean estudiar). Estas traducciones pueden compararse entre ellas (un buen ejemplo lo ofrece Biblia Paralela), lo que permite un nivel de acceso a los textos que se acerca en alguna medida al del especialista (que es el que suele ofrece este material en internet), por lo que cualquier investigador, incluso a pesar de no conocer la lengua original del texto que estudia, puede confeccionar un trabajo en el que se evidencia la mejora de modo notable en fiabilidad y calidad
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Son cada vez más importantes las revistas electrónicas; como las revistas científicas en papel cuentan con un comité de redacción que controla los artículos que se envían y que salvaguarda la calidad de la publicación, su mayor interés radica en la inmediatez de la difusión (al obviar la impresión en papel y la distribución). Destaca el caso de la revista española Ilu. Revista de Ciencias de las religiones, que incluía en libre acceso todos sus números y anejos un año después de su publicación en papel (y que desde 2018 solo se publica en versión electrónica). La mayoría de las revistas tienen ese acceso electrónico pero insertas en plataformas de pago
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2) Documentación. La constitución de internet en red básica para el acopio documental especializado se está consolidando dado que numerosos centros de investigación están ofreciendo todo tipo de materiales de modo público. Es posible acceder a textos religiosos, a iconografía religiosa (o incluso iconografía en general, como la que ofrece el Beazley Archive o la Paul Getty Foundation o los distintos museos) a obras literarias (el campo con mayor inversión y desarrollo) o incluso a documentos originales tanto bibliográficos (como ofrece, por ejemplo, la Biblioteca Nacional de Madrid) como de otro tipo (imágenes, música, etc.). Está potenciándose la construcción de grandes bases de datos que ofrecen una documentación que con anterioridad se hallaba dispersa y mal organizada; así cualquier centro de investigación de cualquier parte del mundo se puede convertir, gracias a internet, en un punto de acceso a documentación original (digitalizada) con lo que cualquier investigador puede obviar la visita física a los centros de custodia de los archivos o documentos originales. Un buen ejemplo lo ofrece la labor realizada desde el Santuario del Libro del Museo de Israel en  Jerusalén respecto de los manuscritos del Mar Muerto que custodian (http://dss.collections.imj.org.il/).
Esta labor de digitalización de materiales es sin duda de uno de los grandes retos que enfrenta la sociedad actual en lo que al desarrollo de la cultura se refiere.

3) Socialización de lo que se estudia. Otro aspecto de internet interesante son los grupos de discusión y de intercambio de información, y en general las posibilidades de diseminación (y también de distorsión) de las redes sociales sobre diversos temas religiosos. Resultan recursos muy numerosos, y ponen en contacto a usuarios de muy diversos orígenes, credos personales y cualificación (lo que puede resultar en ocasiones comprometido desde la óptica de un investigador universitario, salvo que el interés radique en estudiar este tipo de nuevo estilo de creación y transmisión de ideas). En la línea de obviar algunos de estos inconvenientes han surgido listas restringidas dedicadas tanto a temas específicos (mística, nuevas religiones, método, etc.) como a usuarios con una orientación profesional determinada (abiertas solamente a los investigadores y no a usuarios generales o miembros de grupos religiosos). Un ejemplo de este tipo de listas muy especializadas lo ofrece Tonantzin, patrocinada por la EASR (European Association for the Study of Religion) y que pone en contacto a profesores e investigadores en lengua española, italiana y portuguesa, dedicados al estudio científico de la religión (https://easr.eu/e-networks/).

4) Acceso a los grupos religiosos y sus propuestas. Muy diversos grupos religiosos usan internet para transmitir sus sistemas de creencias, sus textos sagrados (traducidos o en la lengua original), su música, sus ritos, sus modos de entender el mundo; para ofrecer información sobre modos de contactar con ellos y convertirse en adeptos, cultores o simpatizantes (virtuales o en el mundo real). Internet se convierte por tanto en un foro abierto en el que circulan informaciones que en muchos casos no existe otro medio de procurarse, pues, por ejemplo, permiten dimensionar el impacto a nivel mundial de grupos religiosos muy minoritarios o de nuevas religiones. Un trabajo de sociología de las religiones que intente acotar el impacto de un grupo religioso particular, gracias a internet puede disponer de materiales de primera mano y completamente actualizados. Además, y muy potenciado por los cambios de socialización que ha propiciado la pandemia de covid19, muchos grupos religiosos utilizan la videoconferencia (que luego se ofrece de modo abierto o restringido) en plataformas como youtube que se convierten en un auténtico foro de religiones.

5) Inteligencia Artificial Generativa. Presenta la fascinación de la conversación, es como un "informante a sueldo" que te contesta a todo lo que le preguntas, hasta lo que no sabe. Si te conoce lo suficiente intentará individualizar la respuesta para satisfacer tus expectativas. Funciona bastante bien para los temas más generales donde puede haber suficiente información para resumir, es mucho menos fiable en temas más concretos o lejos del "mainstream". De hecho intenta llevar la respuesta a territorios de lo académicamente estándar y por tanto (evidentemente) apuntala lo más común y tenido por correcto. Por tanto es muy necesaria la prevención metodológica hacia argumentos religiocéntricos o sesgados en lo que conteste. Hay que revisar bien lo que propone (bibliografías fantasiosas, ideas comunes que se asocian con un autor cuando ese autor puede haber defendido lo contrario...).

6) Nuevo modelo de fuente. Avanzando en la reflexión se podría decir que más que una fuente para el estudio de las religiones (al estilo tradicional), internet tiende a consolidarse como un nuevo modelo de ofrecer información multisoporte, desde lo instrumental (como la bibliografía) hasta la inclusión de material específico que solo se halla en la red. Internet como fuente se convierte en una mezcla de religión legible, visible, audible, que aumenta su interés como resultado de ser un foro completamente abierto y sin las censuras y restricciones que impone el establishment (sea cual sea éste en el país o la zona que se trate).
Internet, desde esta perspectiva, se convierte no en un mero instrumento sino en una auténtica fuente, en un lenguaje de la religión que tiende a convertirse en hegemónico, en mayor medida aún puesto que lo que se diseña para internet suele hacerse según unos criterios especiales que tienen en cuenta las características y versatilidad del soporte. Así se pueden hacer estudios de índole nueva, de lo que piensa un número muy variado de personas que utilizan las redes sociales (que potencian un nuevo estilo, en el que pregunta y respuesta se combinan de un modo muy dinámico).

7) Necesidad del uso más sofisticado del método crítico. Aunque Internet resulte una herramienta insoslayable en la actualidad para cualquier trabajo en la disciplina de estudio de las religiones, hay que tener en cuenta que se trata de un crisol en el que se mezclan muy diversas fuentes de información. El material que ha sido elaborado por especialistas e investigadores solventes resulta de uso inexcusable (aunque con sus específicas orientaciones y sesgos); pero las informaciones ofrecidas por grupos religiosos y espirituales presentan agendas específicas que hay que detectar y reconocer. Resulta por tanto necesario realizar una criba y tener presente la fuente que vierte en internet una información y los motivos que pueden haber llevado a que lo haga, puesto que no siempre el altruismo y el deseo de que la investigación se desarrolle es la causa que preside este tipo de actuaciones y hay que tratar lo que aparece en internet con el mismo método (crítico) que si se tratase de cualquier otro documento en soporte convencional.

Cabe preguntarse si podemos ser capces de aplicar a internet (con el que nos relacionamos por medio de un interfaz que es una pantalla) el método crítico de modo comparable al de los soportes tradicionales (se trata de pensar en posverdad y religión).



Este material es una adaptación y puesta al día de análisis que se exponen en F. Díez de Velasco, La Historia de las Religiones: métodos y perspectivas, Madrid, Akal, 2005, pp. 208-210. Reflexiones previas en: "Recursos en Internet para la investigación y la docencia en Historia de las Religiones " 'Ilu. Revista de Ciencias de las religiones 1, 1996, pp. 39-51.